lunes, enero 02, 2012

2012

Y despedí el 2011 errando, solo para no perder la costumbre, sumé un nuevo error a mi equipaje... No, no es que tú seas un error, por el contrario, creo que yo fui el error, y ahora te sientes mal porque sabías bien en el fondo que no era lo correcto, o que tal vez no fue lo suficientemente bueno, o que simplemente no era lo que esperabas...

Y ese silencio, ese silencio vacío que me obliga a bajar la mirada y a decirme que me aleje de lo dañino, pero no puedo... Ahí estás y no puedo evitar querer llegar a ti, pero me nublo, me da miedo, no quiero que me veas frágil, no quiero que te des cuenta de que puedes romperme con un par de palabras, o gestos, o silencios...

Y te alejas, te pierdes, te pierdo... Luego regresas como si nada, y finjo que no me ha importado, que todo está bien, que nada ha cambiado... Y sé que a veces estás triste, pero no sabes que me duele tu tristeza, no sabes que cuando no sonríes mi día es un poco más sombrío.

No te quiero, es cierto, y no sé si un día lo haga, pero me aterra pensar que si llego a hacerlo estará mal, me aterra pensar que te alejarías aún más deprisa, desvaneciéndote hasta solo ser una sombra.

No te quiero, es cierto, pero siempre puedo equivocarme.

No quiero tener que decirte adiós desde este rincón, no quiero tener que decirte adiós, punto, porque ahora tienes algo de mi, no te diste cuenta pero te lo llevaste aquella noche, donde todo fue como un juego, cuando a veces hablabas, cuando a momentos podía sentir tu mirada perdida en mis ojos.

Sí, un juego, una ruleta rusa, una apuesta que perdí, aunque no te diste cuenta.

Y ahora, este 2012, lo único que anhelo es oír tu risa una vez más...

No hay comentarios.: